El silencio de todos los fantastmas
ausente y la confundía,
se despedía y podría haberla llamado
Azul o simplemente por su nombre,
era absurdo el momento,
como todos esos instantes sin razón
que cerramos los ojos e intranquilos
despertamos a media luna,
a media copa;
con la mitad del pecho destrozado
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.